El mar de los renegados
Siglo XIV. Lezo, un niño perteneciente a una familia de balleneros vizcaína, contempla en su primera travesía como su padre y hermano mayor son asesinados junto al resto de su tripulación por una flota pirata. Desde ese día, perseguido por la culpa y los remordimientos, iniciará un viaje desenfrenado en busca de venganza y perdón, que le llevará a ser testigo de alguna de las batallas navales más sangrientas de la Guerra de los Cien Años entre Francia e Inglaterra, así como a tomar parte en las luchas de los mercaderes vascos y cántabros contra la armada del rey Eduardo III de Inglaterra. Pero cuando el sufrimiento por las consecuencias de sus actos alcanzan a los pocos que aún le importan, Lezo hallará la posibilidad de lograr la tan ansiada redención, al saber que el señor de Vizcaya ha muerto, dejando huérfano en las lejanas tierras de Paredes de Nava a su único descendiente varón y legítimo heredero al Señorío: Nuño Núñez de Lara y Díaz de Haro; un niño de tres años de edad del que desea apoderarse el rey de Castilla y León, Pedro I “el Cruel”. Lezo y los suyos deberán llegar a su joven señor antes que el rey Pedro I, a través de unas tierras devastadas por las luchas de banderizos vascos y los crímenes y conjuras nobiliarias de la Corte castellana; a través de sus demonios interiores, ambiciones y odios desmedidos, guerras fratricidas, y la lucha de los hombres y mujeres comunes por la supervivencia y la salvación, en una Europa azotada por el hambre, la guerra y la peste.